ENTREVISTA a Cristina Moratinos. Área Red Neural DROTIUM

Agrupar personas, integrarlas en proyectos, formar equipos, cumplir objetivos, cuando se está trabajando en el límite de las habilidades y conocimientos, en actividades muy disruptivas, no es tarea sencilla

Cristina Moratinos

—¿Trabajaré en DROTIIUM siempre haciendo lo mismo, sin salirme del panel de habilidades por los que fui elegido?

—Déjeme que le haga una pregunta. ¿Vd. trabaja mejor de noche o de mañana, es buho o alondra? ¿Cuánto tiempo entrega a la organización DROTIUM? Para DROTIUM, más importante que el tiempo que Vd. entrega a la compañía es el rendimiento de su tiempo. Así que, directamente, debemos valorar el objetivo y llevar a segundo plano sus horarios.

—¿Le preguntaba si todos debemos estar en nuestro surco, sin salirnos?

—Perdone. Le contesto. Hay mucha gente que dice, por ejemplo, "yo programo en pitón y del resto de lenguajes no quiero saber nada". Es una actitud anacrónica. 'Pitón (el lenguaje de programación)' es su identidad, como antes era ser azujelista o soldador. Eso ha cambiado. Intentaremos que las personas tengan dos actividades, una principal y otra secundaria. No es fácil de implementar, pero lo intentaremos. Antes teníamos un profesión para toda la vida. Ahora, por lo común, ya hemos tenidos muchas y en el futuro tendremos dos o más profesiones simultáneamente. Es un cambio casi dramat6ico. Nos obliga construir nuestra identidad de otro modo.

—¿Podreemos gestionar tantas identidades?

—La identidad no la proporciona la profesión. Las habilidades profesionales constituyen una parte de la identidad. No son toda la identidad. Einstein formuló la Teoría de la Relatividad y nos enseñó que el Espacio-Tiempo se curvaba. ¿Ahí se acaba Einstein? Se trata de proteger la plasticidad del cerebro. Sabiendo y eso lo sabemos todos, que no debemos desperdiciar nuestras habilidades más sobresalientes. Mantiene fresco nuestro cerebro. ¿Es fácil trasladar dicho esquema a una compañía como DROTIUM? NO. Colisiona con las tradiciones laborales. ¿Es aconsejable hacerlo? Desde luego que sí.

>GESTIÓN DEL TALENTO

—¿No se corre el riesgo de desperdiciar talento?

—Pues sí. Una persona muy competente en una disciplina, obligada a poner sus cualidades al servicio de otras tareas y retos, puede sentir que malgasta su tiempo. Es un asunto muy delicado. Implementarlo es complejo. Se hará gradualmente y teniendo en cuenta el perfil de las personas implicadas y, en principio, debiera ser más voluntario que obligatorio. La implementación será gradual. Esto va de lo siguiente, las personas que son muy creativas, lo son, como norma y añaden viento fresco a cualquier proyecto al que se incorporan. De esto se trata. Se trata de preservar la plasticidad del cerebro y es asunto que necesita entrenamiento y es bueno para todos. ¿Cómo afecta al rendimiento general de la compañía? Lo más probable es que la compañía mejore. Le repito que no será fácil implementarlo y que se hará, primero gradualmente y se iniciará cuando las circunstancias lo permitan.

—¿Trabajaremos cinco días, cuatro días, 3+1 y ese uno haciendo otra cosa o 3+2, cómo será nuestra jornada laboral?

—Me trastabilla la realidad. Me habla como una central sindical o como un inspector laboral. Está traduciendo, a su modo, objetivos y logros a esquemas sindicales. La sociedad ha cambiado mucho.

—Al final habrá traslación, tendrá consecuencias prácticas...

—Las tendrá, claro que sí. No lo discuto. Haga Vd. un esfuerzo. Imagine que la gente que trabaja en lo que constituye el corazón de DROTIUM, el que más nos debiera preocupar a todos, el de I+D+i, está organizada en proyectos y equipos y tiene libertad para establecer su régimen de trabajo, sus objetivos y sistemas de recompensa. ¿Es dicho esquema que papel juega imponer una jornada laboral?

—Pero en esos equipos no todo el mundo rinde igual y se necesitará un poco de justicia...

—¿Qué pasa si el equipo decide proteger a uno de sus miembros, simplemente porque les hacer reír o porque genera argamasa, les une? ¿Vd. metería la cuchara en ese supuesto y entraría con el látigo a imponer justicia...? Suponga que lo hace y el equipo se rompe. ¿Es esa una buena gestión?

—Eso suena a couching...

—No. Estamos hablando de humanizar el trabajo. Y le repito que si hablamos de un trabajo de oficina, donde tenemos que hacer asientos de esto y aquello, entonces, claro, es posible secuenciar los horarios y los esfuerzos el trabajo y será, con seguridad, una buena solución.Si estamos defendiendo una lineal de producción, que avanza a una determinada velocidad, naturalmente, tendremos, imperativamente, que secuenciar los horarios y los esfuerzos.

>PERSONA,CIUDADANO, USUARIO

—¿Podremos trabajar menos horas para tener vida personal?

—Es un objetivo de DROTIUM. Pero se gana mucho en vida personal cuando se reducen el sofing (las horas de sofá, entretenidos por terceros). Se gana mucho en vida personal si encontramos otra forma de movernos, más eficiente. Si nuestras ciudades dejan de ser irritantes y orientadas al estrés, también se gana mucho. No todo se resuelve reorganizando la  vida profesional.

—Si dejamos de ir a la oficina, perdemos la recompensa exterior la que nos proporcionan los demás y hemos sido entrenados para desear la recompensa exterior...

—Pues importa y mucho la recompensa interior. La que te proporcionan los tuyos. Estar acogido y reconocido es lo más valioso y es anterior a la vida profesional. Tendremos que reformular la sociabilidad. Somos una especie social y necesitamos a los otros. Ir al trabajo es litúrgico, un hecho casi sacramental, la comunión con la gente, con los demás, un acto de sociabilidad. Se llenan los estadios para celebrar, exactamente, la comunión con la gente, la representación litúrgica de la pertenencia. Es cierto. Tenemos que hacer frente a esa necesidad primigenia, la necesidad de sociabilidad, de reconocimiento externo. Formas parte de la comunidad. El trabajo, la actividad profesional, juega un rol, pero no lo es todo, ni lo debe ser. Esta es la cuestión.

—Los jóvenes están, por lo general, hasta el moño, del trabajo en-línea...No socializan.

—Necesitan interactuar porque son jóvenes y porque el aprendizaje puede ser más rápido. Un compañero te puede resolver una duda con un gesto o con una ironía... Son ese tipo de cosas. En mi opinión hay que equilibrar el trabajo en línea con otro tipo de encuentros. Es un problema a resolver. Hay que encontrar compromisos, soluciones equilibradas. En cualquier caso, volvemos al argumentario anterior, antes que profesionales, tenemos que ser personas y después ciudadanos. Si se arruina la perspectiva humana convirtiéndonos en usuarios o consumidores, vamos mal. DROTIUM está aquí para resolver problemas que la humanidad sí tiene: un patrón de movilidad en las distancias micro, pequeñas y medias, endiablado y muy ineficiente.